Desafiando las condiciones del éxito profesional
En un reciente episodio del podcast "Somos Aliadas" la periodista Paola Rojas tuvo como invitada a Priscila Arias, también conocida como la "Fatshionista." Durante la conversación, Priscila habló sobre el amor propio y compartió una poderosa declaración: ella ya ha alcanzado todo lo que la "delgadez" se supone que promete a las mujeres. En un momento de realización personal, Priscila se preguntó:
"¿Por qué me estoy poniendo condiciones para quererme?"
Tomando distancia de las apariencias, quise explorar cómo esta pregunta se aplica a nuestra relación con el trabajo y la carrera profesional. ¿Por qué nos ponemos condiciones para ser felices, sentirnos productivos, realizados o satisfechos en nuestra carrera? ¿Por qué nos condicionamos a alcanzar ciertos puestos, roles o seguidores para sentirnos completos? Con el tiempo, una crece y madura, y se da cuenta de que lo que verdaderamente importa es disfrutar de una rica comida en familia mientras vemos a nuestro equipo de fútbol jugar como nunca y perder como siempre. Y al final del día eso realmente no importa, porque lo importante es el momento compartido, como cuando están a punto de partir el pastel.
A menudo, por estar tan enfocados en el futuro, el presente nos pasa desapercibido. Me he confrontado con la posibilidad de que el síndrome del burnout, o el desgaste laboral, estudiantil o personal, pueda surgir también de una falta de amor propio. Aunque me cuesta aceptar esta verdad, puedo verlo claramente y ahora reconocerlo.
El amor propio implica cuidar y valorar nuestro propio bienestar emocional, físico y mental. Una dura realidad es que cuando no tenemos suficiente amor propio, podemos:
Sobrecargarnos: Asumir demasiadas responsabilidades y no establecer límites saludables.
Ignorar nuestras necesidades: No atender nuestras propias necesidades emocionales, físicas y mentales.
Priorizar a otros sobre nosotras mismas: Sacrificar nuestro bienestar por el de otros.
No practicar el autocuidado: No tomar tiempo para relajarnos, descansar y recargar energías.
Ser demasiado autocríticos: Ser excesivamente duros con nosotras mismas, lo que puede llevar a la ansiedad y el estrés.
Recordemos que el burnout es un estado de agotamiento emocional, mental y físico causado por el estrés crónico. La falta de amor propio puede aumentar el riesgo de desarrollar burnout, ya que no nos permitimos, o en mi caso, no me permitía cuidarme adecuadamente.
Algunas señales de falta de amor propio que pueden contribuir al burnout incluyen:
No saber decir "no"
Tener dificultades para establecer límites
Ser demasiado perfeccionista
No priorizar el autocuidado
Tener una visión negativa de uno mismo
Es importante practicar el amor propio para prevenir el burnout. Esto incluye:
Practicar el autocuidado
Ser amable con uno mismo
Priorizar nuestras necesidades
Aunque para mí es más fácil decirlo que ponerlo en práctica, no puedo dejar de insistir y recordarte que detrás de la falta de autocuidado se esconde una vida controlada por las circunstancias, en la que no nos damos el tiempo para reaccionar adecuadamente. Recuerda que el amor propio no es egoísmo, sino una necesidad fundamental para mantener nuestro bienestar y evitar el agotamiento.
Referencias:
Somos Aliadas Podcast. (2024, August 6). Activismo corporal: ‘La Fatshionista’ [Video]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=YZ-LMO5i3TM