No puedo respirar, Sr. Stark
Imaginen a un joven profesional en el suelo, agonizando y sin estar seguro de por qué. Su jefe, el Sr. Stark, sostiene su mano y lo mira con preocupación; sus últimas palabras son las siguientes:
"No puedo respirar, Sr. Stark".
Y el Sr. Stark observa con angustia cómo su cuerpo se desmorona como cenizas y se desvanece en el aire contaminado.
El Sr. Stark acaba de perder a su mejor empleado debido a la contaminación.
Bueno, sabemos que la historia no fue así; el Sr. Stark perdió a su mejor empleado por un chasquido que un villano hizo posible con su guante cósmico.
La mala calidad del aire ha sido un tema relevante en la ciudad de Monterrey, llegando al punto de movilizar a la sociedad civil a protestar y reclamar más conciencia, así como plantear regulaciones y acciones concretas para abordar la situación. La sociedad se está enfermando y este problema va más allá de una simple temporada de alergias.
Coincidentemente, la norma 037 de teletrabajo se está haciendo efectiva y varias compañías están tomando las acciones necesarias para aplicarla. En mi lugar de trabajo, nos pidieron llenar un formulario y una lista de requisitos que posteriormente personas de la empresa revisarán y evaluarán para determinar si los trabajadores nos encontramos en condiciones óptimas para trabajar desde casa. Soy un fiel creyente de que un modelo híbrido de trabajo es la respuesta más adecuada para que un empleado alcance una vida estable ante una realidad que constantemente eleva el nivel de complejidad de existir.
Entre la inflación de precios, la crisis inmobiliaria, la crisis de las pensiones, la mala planificación en la vialidad, por mencionar algunas, el cambio climático es otra crisis que afectará nuestra experiencia como usuarios en el trabajo. Simplemente pensando en aquel empleado que depende del transporte público para llegar a su trabajo, tiene que soportar las altas temperaturas del verano y la mala calidad del aire, enfrentando una posible deshidratación, dolor de cabeza o malestar. Aún así, debe gestionar las tareas laborales, sacarlas adelante, esperar otra vez el medio de transporte, tener paciencia para sobrellevar el tráfico y llegar a su casa exhausto simplemente para repetirlo todo al día siguiente.
Si bien entiendo que hay trabajos que necesariamente se tienen que realizar de forma presencial, no puede ser que no haya flexibilidad para considerar que ese tiempo perdido en el desplazamiento en el tráfico y el malestar físico, por mencionar algunos problemas ambientales, no entren en la ecuación de una empresa que se responsabilice por sus activos más importantes: las personas.
Veo comentarios allá afuera de personas empujando por las juntas presenciales, abogando que impulsan la productividad, pero teniendo una tremenda falta de empatía por sus colaboradores, haciendo a un lado que todos los días estamos trabajando con humanos.
Sin embargo, querido lector, no voy a hablar de la falta latente de inteligencia emocional de algunos gerentes, sino del impacto de la mala calidad del aire en la productividad de una organización.
Tom Y. Chang, Joshua Graff Zivin, Tal Gross y Matthew Neidell, autores del artículo para HBR titulado "La Contaminación del Aire Está Haciendo Menos Productivos a los Trabajadores de Oficina", realizaron una investigación que se centró en analizar cómo la contaminación del aire afecta la productividad de los trabajadores de oficina, específicamente en el contexto de un centro de llamadas en China. El estudio utilizó datos detallados de la empresa para examinar la relación entre los niveles diarios de contaminación y la cantidad de llamadas manejadas por los trabajadores. Los resultados mostraron una conexión significativa entre la calidad del aire y la productividad laboral, incluso en entornos donde la contaminación se consideraba relativamente baja.
En promedio, un aumento de 10 unidades en el Índice de Calidad del Aire (ICA) llevó a una disminución del 0.35% en el número de llamadas manejadas por un trabajador del centro de llamadas. Esto sugiere que los trabajadores son un 5%–6% más productivos cuando los niveles de contaminación del aire son considerados buenos por la Agencia de Protección Ambiental (ICA de 0–50) en comparación con cuando son considerados insalubres (ICA de 150–200).
Se determinó entonces que la contaminación podría afectar la función cognitiva, lo que podría tener implicaciones importantes para trabajos que requieren habilidades más avanzadas.
La doctora Talia Varley, líder médica del Servicio de Asesoramiento en Cleveland Clinic Canada, escribió en su artículo, también para HBR, titulado "Preparación de tu Empresa para los Efectos de los Incendios Forestales", que la mala calidad del aire no solo afecta las funciones cognitivas de las personas, sino también la capacidad de concentración y puede exacerbar condiciones de salud como el asma y la ansiedad, lo que lleva a un aumento del ausentismo. La doctora Varley sugiere, hoy más que nunca, que exista una colaboración constante entre la comunidad médica y los líderes de las organizaciones y sus equipos de recursos humanos.
"La calidad del aire se convierte en un factor clave que afecta la salud y la productividad de los trabajadores."
En última instancia, reconocer y abordar el impacto de la contaminación del aire en la productividad y el bienestar de los empleados es fundamental para construir organizaciones resilientes y sostenibles en un mundo en constante cambio. En un contexto donde los impactos del calentamiento global se hacen cada vez más evidentes, adoptar medidas proactivas se vuelve una urgencia apremiante. Las empresas no pueden permitirse el descaro de pedir a sus empleados que se "pongan la camiseta" cuando esa misma camiseta puede ser la causa de alergias y problemas de salud. Es esencial que las empresas actúen con responsabilidad y empatía hacia sus empleados, tomando medidas concretas para garantizar un ambiente laboral seguro y saludable para todos.
Referencias:
Chang, T. Y. (2016, September 29). Air pollution is making office workers less productive. Harvard Business Review. https://hbr.org/2016/09/air-pollution-is-making-office-workers-less-productive
Varley, T. (2023, June 13). Is your company prepared for the effects of wildfires? Harvard Business Review. https://hbr.org/2023/06/is-your-company-prepared-for-the-effects-of-wildfires#:~:text=Poor%20air%20quality%20impacts%20employee,presenteeism%2C%20and%20leaves%20of%20absence.